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Análisis técnico del Renault R26 que hizo bicampeón a Fernando Alonso

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Desde la sección Técnica de MomentoGP os traemos un artículo muy especial a modo de homenaje a Fernando Alonso. Concretamente, un análisis técnico del Fórmula 1 con el que el piloto asturiano consiguió su segundo campeonato del mundo, el Renault R26.

El Renault R26 compitió cara a cara durante la temporada 2006/2007 con el Ferrari 248 F1, consiguiendo el campeonato del mundo en una emocionante última carrera. Con él, Alonso consiguió 7 victorias, 6 poles y 14 podios pero ¿qué secretos guardaba el R26?

Fernando Alonso, bicampeón del mundo

Una de las principales diferencias del R26 era su morro ancho, el cual incrementaba la fuerza de sustentación de la zona delantera por tener una mayor superficie útil.

Renault R26. Giorgio Piola

La siguiente de las novedades destacables que trajo en grandes premios posteriores fueron los endplates del alerón delantero, un avance que había incorporado McLaren en Imola. Este elemento permitía reducir las turbulencias cuando el aire pasaba por el ala delantera para posteriormente impactar en los neumáticos.

Renault R26. Giorgio Piola

Para el Gran Premio de España incorporaron un alerón trasero novedoso, con una zona central muy curvada respecto a los extremos, cuyo objetivo era maximizar la sustentación sin que por ello se viese perjudicada la resistencia aerodinámica.

Renault R26. Giorgio Piola

En Mónaco, maximizaron la carga aerodinámica incorporando aberturas en los winglets. Esto se combinaba con unos endplates mayores, dando como resultado un monoplaza muy competitivo.

Renault R26. Giorgio Piola

En el Gran Premio de Gran Bretaña, se descubrió el gran secreto con el que contaba el R26. Se trataba de un amortiguador interno situado en el morro delantero, con el que se conseguían reducir las vibraciones generadas en las grandes variaciones de velocidad. Esto permitía que el monoplaza estuviese mucho mejor balanceado.

Renault R26. Giorgio Piola

No obstante, la escudería francesa continuó su trabajo exhaustivo y en el Gran Premio de Canadá incorporó dos winglets en la zona delantera del monoplaza que permitían redirigir el flujo de aire, aumentando la eficiencia.

Renault R26. Giorgio Piola

Carreras después, con el objetivo de seguir mejorando el balance del coche, Renault trajo al Gran Premio de Turquía unos nuevos elementos aerodinámicos que se les denominó “orejas”, situados en la zona central del monoplaza junto al piloto.

Renault R26. Giorgio Piola

Ya en Brasil, y con el mundial en un puño, la escudería francesa mejoró ligeramente la zona delantera del coche, incorporando un perfil tipo cuchillo en la zona lateral del ala delantera. Esto, en principio, aumentaba la eficiencia aerodinámica al reducir el impacto del flujo del aire con las ruedas delanteras.

Renault R26. Giorgio Piola

Finalmente, y con todas estas novedades aerodinámicas que Renault iba incorporando en cada Gran Premio, Fernando Alonso logró coronarse por segunda vez como campeón del mundo de Fórmula 1.

¡Pero esto no acaba aquí! El próximo domingo traeremos un nuevo análisis técnico de otro monoplaza icónico que condujo Fernando Alonso…

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