BMW llama a revisión a 1,6 millones de vehículos

La firma alemana BMW ha anunciado que cerca de 1,6 millones de sus automóviles diésel alrededor de todo el mundo podrían sufrir fugas de líquido refrigerante inflamable (que contiene glicol) que provocarían daños en el colector de admisión y, en casos extremos, un incendio. Los vehículos en cuestión fueron producidos entre 2006 y 2017, con bloques motor de 4 y 6 cilindros.

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El primer comunicado se realizó en agosto de este mismo año, tras registrarse en Corea del Sur más de 30 casos de incendios en modelos de la marca. Se comenzó llamando a taller a 480.000 vehículos, en países de Europa y Asia. Esta cifra se ha ampliado recientemente a 1,6 millones por motivos de seguridad, ya que los modelos poseen un setup del motor muy similar al de las unidades afectadas. Sin embargo, la propia BMW ha asegurado tras numerosos chequeos que en dichos vehículos el riesgo de fallo es mínimo.

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«En algunos vehículos diésel, el líquido refrigerante de glicol puede producir un goteo», todo ello debido a un componente defectuoso llamado enfriador de recirculación de los gases de escape (procedentes de la EGR, Exhaust Gas Recirculation). «Este líquido fugado del sistema puede combinarse con otras sustancias a alta temperatura, para crear el riesgo de incendio«, dijo el grupo. Obviamente, el comunicado afirma que «se revisará el módulo de recirculación de escape y si existe algún fallo, se sustituirán las partes», dijo el grupo.