Hamilton acaba la polémica con Bottas

Peculiar como pocos, sin miedo a la repercusión de sus palabras, Hamilton soltó una pequeña bomba en el seno de Mercedes que de bien seguro no contentó a sus jefes. La polémica saltó cuando Lewis declaró que no quería «ver la telemetría» de sus compañeros, ya que cree que «no es justo» que pueda «estudiar sus datos». La cosa pero, no se quedó allí y Hamilton lanzó con toda la intención del mundo, un dardo de aviso hacia su nuevo compañero: «Cuando pilotamos, seleccionamos los puntos de frenada, baches, marcas del neumático… todas esas cosas que te ayudan a trazar las curvas más rápidas. Y el otro piloto, con los datos, puede simplemente copiarte y hacerlo más o menos como tú», afirmaba Hamilton.

Por eso es un enamorado del karting, porque como él dice y para redondear su pequeño ataque previo al inicio de la nueva temporada, «ahí sólo brillabas por tu talento”. Declaraciones que buscaban un objetivo, menos mimos para Bottas, menos ayudas para el nuevo que le puedan acercar al ritmo de Hamilton. No quiere repetir la historia que vivió con Rosberg, no quiere el enemigo en casa.

Foto: Getty Images

Se quejó de lo que un día aprovechó para crecer más rápido como piloto, cuando en 2007 con Fernando Alonso como compañero reconoció que las telemetrías del español fueron imprescinidibles para él y que sin ellas «no habría podido vencerle”.

Viendo ahora el polvo que ha levantado sus declaraciones, Hamilton ha salido al paso aclarando el por qué de sus mensajes, con dos tuits: «No he golpeado a mi equipo en absoluto. Mi punto sobre el intercambio de datos es sólo mi sentimiento sobre el deporte en general», escribía el piloto inglés a lo que añadía: «Ha sido mi sentimiento desde el día que empecé en la F1 y todavía lo es 10 años más tarde. Hay cero problemas en mi equipo, cero problemas con Bottas», comentaba Lewis.

Ejerciendo de bombero, apagando el fuego que él mismo inició. Dicen que rectificar es de sabios, aunque últimamente el inglés lo tiene que hacer en demasiadas ocasiones.