Kubica ha demostrado a Renault que puede ser rápido con los nuevos monoplazas.

Son muchos los nombres que están en el saco de Reanult en esta «silly season» para sustituir a Jolyon Palmer. Pero si hay un nombre que ha cogido mucha fuerza y que la afición apoya cada vez mas es el de Robert Kubica. El piloto polaco que vio acabada su carrera en la categoría reina del motor en el año 2011, tiene cada vez más posibilidades reales de competir en la próxima temporada.

formula1.com

La marca francesa cree en Robert y ha apostado por él. Hace dos meses, Renault concedió un test con un volante adaptado en el E20 para Kubica en Jerez y más tarde con ese mismo coche apareció en el Festival de Goodwood. El regreso del piloto polaco parecía poco probable debido a las diferencias del monoplaza actual al E20. Pero en un segundo test, en Hungria, a bordo del R.S.17, Robert realizo una serie de tandas para desarrollar el rendimiento del monoplaza de este año. Tras un exitoso test, Renault confía cada vez mas en Kubica y aumentan sus posibilidades de vestir de amarillo la próxima temporada.

Con la poca información proporcionada por los equipos, se desconoce la configuración que llevaba el monoplaza en el Hungaroring. Aun así Renault confirma que Robert no tuvo ningún problema en conducir estos monoplaza tan exigentes. «Kubica no tiene problema para conducir estos coches nuevos tan exigentes. Lo más importante es que Robert no tuvo nunca gasolina para una única vuelta», comentaba Penteado, jefe ingeniero de Renault que siguió de cerca el progreso de Kubica en los test.

«El otro punto en el que Kubica se mostró fuerte, fue el número que realizo, el cual equivale a dos carreras enteras. A pesar de que el ambiente no ayudaba, con 40 grados centígrados, Robert no se quejó del cansancio en ningún momento. Le pedimos que hiciera unos cambios en el volante y lo realizó en el timing adecuado», explicó Penteado.