Al fin, después de las incertidumbres de los entrenamientos libres del fin de semana, llega el sábado de clasificación. Una sesión que no nos ha dejado indiferentes, a sabiendas de que las balas negras de Mercedes liderarían las dos primeras posiciones de parrilla: Lewis Hamilton vuelve a hacerse con una pole position, terminando el día como el hombre más rápido en pista. Carlos Sainz saldrá sexto en la carrera de mañana.

@F1 Lewis Hamilton saltándose los límites de la pista

La Q1 se lanzaba bajo nubes amanezadoras sin previsión de lluvia durante los momentos iniciales. Los pilotos no tardaban en salir a pista, siendo los Mercedes de los primeros en comenzar a rodar, a la espera de comprobar quién de sus dos hombres sería el que se llevase la pole position en Rusia. Vueltas de prueba y tomas de referencia, Valtteri Bottas se colocaba en lo alto de la tabla con un 1:32.656 que inauguraba la lucha en pista.

Las advertencias sobre los límites del trazado terminaban en varias vueltas eliminadas, una de ellas perteneciente a Lewis Hamilton que, pese a quedarse sin su primera marca, volvía a rodar hasta colocarse en segunda posición. Los cronos de Sergio Pérez y Carlos Sainz se destacaban del resto, situándose por detrás de los Mercedes y por delante del Red Bull de Max Verstappen, mientras que los Ferrari continuaban tratando de sacarle el máximo a su monoplaza, con Leclerc sexto y Vettel decimocuarto a falta de cuatro minutos para acabar.

Con el fin del segundo intento de la Q1, Bottas terminaba líder, con Grosjean, Giovinazzi, Magnussen, Latifi y Raikkonen eliminados tras la sorpresa de tiempos de Kvyat y Ocon, que se colocaban tercero y cuarto respectivamente. Los Ferrari avanzaban de sesión por los pelos.

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Con el tiempo corriendo en el reloj de la Q2, nadie quería quedarse esperando en el box y menos cuando los radares comenzaban a avisar de la posible llegada de la lluvia. Las primeras marcas colocaban a Lewis Hamilton por encima de su compañero de equipo con un 1:32.085, sin embargo, la alegría y la templanza no duraban demasiado, pues su vuelta era anulada tras comprobar que el británico se pasaba los límites de la pista. Con este nuevo escenario, Daniel Ricciardo ascendía hasta la primera posición, por delante de Carlos Sainz, Sergio Pérez y Valtteri Bottas.

Con tres minutos en el reloj, los pilotos se lanzaban a pista a completar su siguiente envite. Cuando todo el mundo se encontraba rodando y preparando sus vueltas lanzadas, un nuevo imprevisto frustraba sus estrategias: Sebastian Vettel perdía el control y destrozaba su monoplaza, provocando una bandera roja que ponía contra las cuerdas a Albon, Stroll, Russell y un sorprendido Lewis Hamilton que se encontraba en el grupo de eliminados a falta de los dos minutos y quince segundos que se paralizaban en el reloj a la espera de la bandera verde.

@F1 Accidente de Sebastian Vettel

Con el arranque tras el accidente, los pilotos salían pegados del pit lane, comenzando a adelantarse entre ellos, en un intento por poder llegar a la meta y hacer una única vuelta lanzada. Daniel Ricciardo cerraba la Q2 en primera posición, con Leclerc, Kvyat, Stroll, Russell y Vettel eliminados. Lewis Hamilton lograba meterse en el último segundo para marcar la vuelta que terminaba por sacarlo de la zona de eliminación y llevarlo hasta la batalla de la Q3.

Con los nervios a flor de piel, pilotos y equipos se enfrentaban a la última sesión de clasificación. Los primeros tiempos revelaban el orden lógico de parrilla al que estamos acostumbrados: Hamilton, Bottas, Verstappen, con una gran igualdad en el resto de posiciones.

Así, los últimos cinco minutos coronaban a Lewis Hamilton como el poleman del Gran Premio de Rusia 2020 con un 1:31.304, que saldrá mañana acompañado en la primera línea por un renacido Max Verstappen y, por detrás de ambos, Valtteri Bottas. Carlos Sainz consigue un gran sexto lugar.

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